El mar, la flora y la fauna que hay en mí

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Domingo 03 de Diciembre del 2023

Donde había tanto fango, ahora percibo una vida tan variada y exuberante que solo he conseguido ver y tocar cuando mi mar está en calma, y nunca durante el oleaje y la tempestad. Me explico. Dentro de mí vive una flora y una fauna de colores que no tienen nombre aún, sin embargo, a pesar del amor y de la paz que me hacen sentir, las pierdo de vista cuando mi mar se agita y el fango las cubre. Dejo de apreciarlas y me desespero porque añoro los colores y las texturas, pero esa añoranza solo agita más el agua y el fango se vuelve más denso. En esos momentos sé que tengo que parar, pero detenerme no es fácil. ¿Quién detiene a una locomotora en marcha? Es un tema de confianza. Cuanta más confianza hay, más puedo abrirme y serenarme. Cuando no me entrego es porque no confío. Cuando no confío hay más fango y por ende, más sufrimiento que, a diferencia del dolor, ese sí es opcional.

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