El frío se me metió muy dentro, hasta el tuétano. También lo siento en la piel que cubre este cuerpecito mío, sobre todo en las piernas, en las ingles, en las manos, en la nariz. No puedo estar descalza porque empeora. Es verano y yo tengo frío. Me estoy enfriando… Es momento de desaparecer, como la Luna. Cuando esté lista volveré a brillar en la oscuridad de una noche sin estrellas.